La violencia y la guerra -fue su mensaje- nunca son el camino de la paz”.
“¿De qué sirve hacer guerras, tantas guerras, si no somos capaz de hacer esta guerra profunda contra el mal?”, preguntó después el Papa
Pongamos todos los medios para conseguir la paz; Paz en nosotros, Paz en el mundo, PAZ para todos personas, pueblos y naciones y en todo.