Y fue allí donde, además de dedicar su vida a los demás, sacó tiempo para escribir una novela de amor. El título ya lo dice: “Cuando el amor habla”. Y tratándose de amor y de misión, la novela va de la vocación misionera y del amor a África de su autor, un amor que tiene sus raíces, su impulso y su sentido en el amor de Jesús de Nazaret.
El autor ha querido reflejar en su novela lo que en su caso es una realidad: que los valores del Evangelio y de la Palabra de Dios se pueden vivir, que no son ninguna quimera. La novela tiene como personajes a un sacerdote, a jóvenes y a misioneros; los misioneros del Níger tan querido por Paco Bautista.
Como dice el autor en una entrevista: “la Palabra de Dios tiene mucho que decirnos. Sin ella se puede vivir, sí, pero con ella la felicidad se puede rozar con los dedos, y notas que el corazón te late al ritmo de la vida, con el fuego del Espíritu te quema, y que ya nada te para, para lanzarte a la Misión”.
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