“Europa es tierra de misión porque tiene que recuperar la memoria de un anuncio olvidado”, constató Taltavull en la conferencia inaugural. El presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral realizó un diagnóstico de la cultura Europa, para después explicar los retos que tiene la evangelización ad gentes dentro de nuestras fronteras. “Muchas veces tenemos el riesgo de ser misioneros en la lejanía, y dejar en silencia a nuestra propia familia”, explicó Taltavull. Ante una cultura europea que ha perdido la fe y que experimenta un oscurecimiento de la esperanza que le lleva a buscar la felicidad en las cosas superficiales y finitas, Taltavull ha instado a la Iglesia a ser misionera aquí.
El reto, según ha explicado, es buscar nuevos lenguajes y caminos para comunicarnos de una forma creativa con el hombre de hoy, que nos acompaña en el autobús, en el bar o en nuestra propia familia. El obispo auxiliar de Barcelona ha subrayado la importancia de la iniciativa de evangelización “Atrio de los Gentiles”, impulsada por Benedicto XVI, que intenta dialogar con el hombre contemporáneo a través de su lenguaje. Asimismo, ha explicado la necesidad de fomentar la apertura a la trascendencia en las guías turísticas que muestran el patrimonio de la Iglesia Católica en España. “Menos museos, y más ir a donde están las personas”, ha animado el obispo. “Nuestra presencia misionera en Europa está ayudada por la fuerza del Espíritu Santo, somos misioneros que rezan y trabajan”, concluyó.